¿Puede un psicodélico despertar el cerebro de una anestesia profunda en roedores?

Además de disminuir el tiempo de sueño en roedores, los psicodélicos serotoninérgicos tienen la capacidad de expandir el repertorio de estados cerebrales funcionales, es decir, el número de formas diferentes mediante las que el cerebro recibe, procesa, integra y transmite información. En contraste, los anestésicos generales tienen efectos opuestos limitando la variedad de dichos estados. Estas observaciones llevaron a los investigadores de la Universidad de Michigan a desarrollar la hipótesis de que el psicodélico serotoninérgico conocido como 2,5-dimetoxi-4-yodofenilamina (DOI) podría revertir la anestesia general y restaurar las condiciones neurofisiológicas asociadas con la vigilia. 

En este estudio, los investigadores administraron DOI por vía intravenosa a ratas bajo anestesia general. Los resultados mostraron que, a pesar de la administración continua de anestesia, el DOI indujo el despertar en las ratas. Este despertar fue acompañado por una recuperación de la conectividad funcional (es decir, la dependencia temporal de la actividad neuronal entre regiones cerebrales anatómicamente separadas). Esta recuperación se observó particularmente en las frecuencias gamma (125-165 Hz), que están asociadas con el estado de vigilia y de actividad cognitiva. En investigaciones anteriores se había observado que estimulantes como la cafeína o el metilfenidato pueden acelerar el despertar de la anestesia, pero estos no restauran la conectividad ni la complejidad funcional cerebral de la misma manera que el DOI. Este es el primer estudio que demuestra que un psicodélico serotoninérgico puede revertir activamente la anestesia general, un fenómeno que no se había observado previamente con otros agentes.

Sin embargo, uno de los hallazgos más relevantes fue que este efecto se bloqueaba cuando se administraba un bloqueador específico del receptor 5-HT2A conocido como volinanserina. Esto sugiere que los efectos del DOI dependen directamente de la activación de estos receptores, los cuales son considerados necesarios para que sustancias como el LSD o la psilocibina generen sus característicos efectos psicodélicos. Estos resultados también fueron comparados con los de lisuride, una droga muy similar al LSD que también se une al receptor 5-HT2A, pero que sin embargo no desencadena efectos psicodélicos. En el caso de lisuride, este compuesto no provocó el despertar ni la restauración de la dinámica cerebral en las ratas anestesiadas. Podría llegarse a inferir por tanto que la capacidad de los psicodélicos de revertir la anestesia general no solo depende del receptor 5-HT2A, sino que requiere una unión muy específica que desencadenaría efectos psicodélicos.

Este estudio podría tener importantes implicaciones para la medicina y la neurología, sugiriendo que los psicodélicos serotoninérgicos podrían no solo tratar trastornos psicológicos, sino también revertir la anestesia y abordar trastornos de la consciencia, como el estado de mínima consciencia, el síndrome de enclaustramiento, o ciertas encefalopatías. Aunque tiene limitaciones, como evaluar solo el DOI y no explorar otros receptores, sus resultados abren nuevas posibilidades terapéuticas.

En conclusión, este estudio proporciona la primera evidencia de que ciertos psicodélicos pueden revertir la anestesia y restaurar características de la vigilia, abriendo la puerta a investigaciones sobre su potencial en trastornos de conciencia, con posibles implicaciones en pacientes en coma o bajo anestesia.